Enlaces a las páginas anteriores del KKE

Los sitios internacionales cambian poco a poco a un nuevo formato. Puede encontrar las versiones anteriores de las páginas que ya están actualizadas (con todo su contenido) en los enlaces siguientes:

 

TRANSFORMACIÓN DIGITAL: ¿PARA LOS BENEFICIOS DEL CAPITAL O PARA LAS NECESIDADES DEL PUEBLO?

Artículo de Makis Papadopoulos, miembro del Buró Político del CC del KKE, publicado en el cuarto número de la revista “KOMEP” de 2023, órgano teórico y político del CC del KKE.

 

 

Tras la reciente tragedia, el crimen en Tempe, mucha gente se preguntó porqué el Estado y los gobiernos que impusieron tan rápidamente las subastas electrónicas, tardan tanto, tantos años, a instalar y poner en función un sistema de seguridad moderno en los ferrocarriles.

En general, no son pocos los que se indignan razonadamente viendo las enormes posibilidades que ofrece el progreso científico y tecnológico para que vivamos mucho mejor, y haciendo la comparación con nuestra situación actual. Los que se informan de que gracias a la inteligencia artificial los parapléjicos ya pueden caminar y personas que eran ciegas pueden recuperar la vista, los que leen sobre grandes saltos tecnológicos que aseguran diagnósticos e intervenciones médicas  precisas, y al mismo tiempo han experimentado y siguen experimentando el aplazamiento y la espera durante meses de cirugías programadas y de exámenes necesarios para que no colapsen los hospitales públicos que carecen de personal.

Todos los partidos del sistema y los portavoces de la clase dirigente, buscan ocultar al gran culpable que impide la utilización de estas enormes posibilidades tecnológicas para satisfacer nuestras necesidades. Para ocultar la verdad proyectan sistemáticamente una narrativa engañosa de doble cara.

Por un lado, presentan el progreso tecnológico rápido como un peligro objetivo, como culpable del aumento del desempleo y de la restricción de nuestros derechos.

Por otro lado, presentan la transformación digital como una varita mágica que abrirá el camino a la prosperidad social y para una transformación favorable al pueblo de este sistema actual inhumano de explotación y de su Estado. Un camino fácil sin luchas clasistas subversivas, sin grandes conflictos sociales.

En particular, el ministro respectivo, Kyriakos Pierrakakis1 ha emprendido una campaña sistemática de propaganda para convencernos de que la transformación digital contribuye decisivamente a rediseñar el Estado enfocando en las necesidades de los ciudadanos; de que la transformación digital no tiene carácter de clase.

Y ¿qué presenta como prueba?

La evidente mejora que existe para obtener más rápidamente certificados y permisos de conducción por las oficinas estatales y la reducción de las largas colas en los Centros de Atención al Ciudadano.

Promociona el nuevo rostro digital del Estado con la creación del portal gov.gr que ha reunido más de 1.500 servicios digitales dispersos y el hecho de que junto con las transacciones fiscales, las transacciones digitales de los ciudadanos con el Estado superaron los 1.200 millones de euros. Destaca como logro el hecho de que el país obtuvo, por fin, una estrategia digital, con el “Libro de la Transformación Digital 2020-2025”. En el mismo sentido, un estudio elaborado por encargo de la Federación Helénica de Empresas (SEV) prevé un ahorro de 270 millones de euros de recursos estatales durante el período 2020-2022, a causa de los servicios que ahora se gestionan de modo digital, enfocando en la reducción del tiempo de transporte de los ciudadanos.

Sin embargo, toda narrativa propagandística choca, tarde o temprano, contra el duro suelo de la vida actual.

La reducción del tiempo de transporte de los trabajadores así como del tiempo empleado por los ciudadanos y los funcionarios públicos para ejecutar sus trámites con las oficinas estatales no se traduce en un aumento del tiempo “libre” y creativo. Se utiliza por el capital para ampliar el tiempo de trabajo y las formas de trabajo flexibles, de acuerdo con la directiva 2019/1152 de la UE (por ejemplo la Ley promovida por el ministro Jatsidakis). En esencia, los grupos empresariales con el fin de aumentar el grado de explotación, quieren tener las manos libres para reducir o aumentar la jornada laboral en función de sus necesidades. Al mismo tiempo el ciudadano se ve obligado a realizar en su “tiempo libre” digitalmente una parte del trabajo que antes  realizaba el funcionario público.

La posibilidad de hacer rápidamente la inscripción digital en las guarderías no cambia la situación inaceptable de la infrafinanciación, de las enormes deficiencias en edificios y alimentación, el alto precio del servicio, la insuficiencia en relación con las necesidades.

Los mensajes de alerta del 112 de protección civil no han ido acompañados de una mejora básica de la protección civil. Han servido como una lamentable coartada de la “incapacidad selectiva” extrema del Estado burgués de responder a las necesidades populares básicas. Esta incapacidad extrema tiene, por supuesto, un carácter clasista. Es la otra cara de la capacidad del Estado de servir al interés estratégico del capital. Grandes territorios forestales y propiedad pulular han vuelto a convertirse en cenizas desde Eubea y Mitilene hasta Tracia.La propia vida demuestra que el progreso tecnológico no supone un riesgo, ni una solución milagrosa a nuestros problemas. La cuestión es quién y para qué intereses determina el desarrollo, la orientación y la utilización de la nueva tecnología y la investigación científica. Detrás de la inteligencia artificial están las opciones de la inteligencia humana y los intereses particulares de la clase que sirve.

Para los que siguen creyendo en el mito del gobierno de que la transformación digital del Estado del capital puede abolir los obstáculos clasistas y abrir el camino para la prosperidad popular, el ejemplo del sector de la salud es, por cierto, muy revelador.

¿Qué dice el gobierno? Que ya todos podemos con la misma facilidad reservar una cita para nuestros exámenes médicos necesarios. Esto es verdad. ¿Esto nos iguala en el acceso a los servicios médicos? No se necesitan conocimientos especiales para responder a ello. Los que harán exámenes completos de forma rápida y cómoda serán los que los pueden pagarlos.

¿Qué anuncia el gobierno actual, así como el gobierno anterior, de SYRIZA? La prescripción inmaterial y la tarjeta sanitaria digital. De hecho, esta modernización puede contribuir teóricamente a la mejora de los servicios sanitarios. Ayuda, por ejemplo, al médico a consultar rápidamente el historial médico del paciente y a predecir el efecto negativo que puede tener la administración de un determinado medicamento en alguien que padece diferentes enfermedades.

Pero, ¿cómo utiliza hoy el Estado capitalista este logro?

Se utiliza para contener y recortar el gasto estatal en sanidad y medicamentos con el fin de garantizar los superávits que nos desangran y se exigen por la clase dominante y la UE.

Y como al ministro respectivo le gusta decir que "no se puede gestionar lo que no se puede medir", veamos lo que demuestran las cifras oficiales de la UE.

Demuestran que un gran porcentaje, el 35% de los gastos sanitarios totales anuales, se paga directamente por las familias, a pesar de los duros impuestos, y que Grecia está entre los primeros puestos de Europa en necesidades médicas insatisfechas y en tiempos de espera.3

Respectivamente, en manos del Estado burgués, la telemedicina, en lugar de ser utilizada de manera complementaria para mejorar los servicios alejados del centro, se utiliza como un modo de sustitución de las grandes carencias de personal científico necesario.

 

EL CARÁCTER DE CLASE DE LA TRANSFORMACIÓN DIGITAL

 

El ejemplo de la sanidad nos ayuda entender que:

– La transformación digital no puede ni pretende cambiar los objetivos, la misión, el carácter de clase del Estado en que se aplica.

– Todos los funcionamientos del Estado actual, del Estado de la dictadura del capital, están entrelazados y sirven conjuntamente a los intereses estratégicos de la clase dominante, refuerzan la competitividad y las ganancias de los grupos empresariales domésticos, y blindan la estabilidad del sistema de explotación.

Esta misión dada del Estado del capital se sirve actualmente por la transformación digital de la Administración Pública. En base a los objetivos antipopulares se determinan los principios de desarrollo y las tecnologías de implementación de la administración electrónica. No existe una transformación digital aclasista que beneficie igualmente a todos los ciudadanos.

Piensen ¿a qué objetivos sirve la transformación digital del funcionamiento económico del Estado burgués?

Sirve a la política económica que continuamente le quita al pueblo, le roba de todas las maneras de su ingreso, para dar, para apoyar la rentabilidad y la competitividad de los grandes grupos empresariales.

Sirve a la política que crea superávits sangrientos recortando salarios y pensiones, imponiendo graves impuestos al pueblo y eliminando derechos de la seguridad social.

Sirve a la política que lleva al aumento continuo de los injustos impuestos indirectos que pagamos todos.

Y, por otro lado, sirve a la política que garantiza que los grupos empresariales paguen menos del 5% de los ingresos fiscales anuales y reciben una gran cantidad de ayuda estatal como apoyo para sus inversiones. El nuevo Plan Nacional de Energía y Clima por si solo incluye inversiones que pueden ascender a los 200.000 millones de euros. Para la mismísima transformación digital se prevén proyectos de 11 mil millones de euros. Ya se han licitado 220 proyectos por valor de 2.300 millones de euros y se han adjudicado 700 millones de euros a asociaciones público-privadas. ¿Quiénes tienen toda la razón de celebrar esta política? Un puñado de grupos empresariales de todos los sectores de la economía. Por ejemplo los grupos empresariales estadounidenses como Google, Amazon, Microsoft, Cisco, que están instalando centros de datos digitales en nuestro país. Con un 5% de capitales propios, se integran directamente en condiciones ventajosas que establece la ley 4864/2021 sobre las inversiones estratégicas.

El Estado se compromete a proporcionar y mejorar la infraestructura necesaria en materia de suministro de agua, conexiones, carreteras, desagües, etc. Y al mismo tiempo adquieren acceso y control sobre la concentración y el procesamiento de datos de todos los ciudadanos griegos.

Por supuesto, los gobiernos afirman que están tomando medidas técnicas de protección de estos datos, etc. Sin embargo, no es difícil comprender que el Estado del capital ni quiere ni tampoco puede garantizar esta protección. El propio marco institucional de la UE abre la puerta a los grupos empresariales para la concentración, el procesamiento y la utilización de todas estas informaciones.

En la mayoría de los casos las notorias inversiones de los grupos empresariales conciernen obras de infraestructura que el Estado asigna a los grupos empresariales. Y por supuesto, esta política no comenzó con el gobierno actual de Mitsotakis. Ha sido implementada de forma continua y consistente por todos los gobiernos de SYRIZA, PASOK y la ND.

Y seguirán implementándola al día siguiente, en base a los compromisos con la UE y el Fondo de Recuperación, en base a las recomendaciones de la OCDE para nuevos superávits sangrientos, para que la clase dirigente obtenga el famoso grado de inversión.

 

¿ABOLICIÓN DIGITAL DE QUÉ EVASIÓN FISCAL?

 

Dada la dirección antipopular de la política económica y fiscal, el Gobierno está promoviendo los libros electrónicos y el registro digital de las facturas de las empresas a través de la plataforma electrónica myDATA. Está concentrando todos los sistemas electrónicos de la Agencia Tributaria y modernizando el Taxisnet con un "recaudador digital" para orientar a contables y contribuyentes.

Anuncia el uso de la inteligencia artificial para comprobar la fiabilidad de las declaraciones fiscales y nos explica que nos beneficiaremos todos de la abolición de la evasión fiscal y de la reducción de las molestias en asuntos fiscales.

Pero ¿qué evasión fiscal pretenden frenar el gobierno y el Estado? ¿La de los grandes grupos empresariales? Ellos ya tienen exenciones fiscales legales,  enormes y provocativas. Los bancos se han asegurado un régimen fiscal diferido, los armadores un régimen de “fiscalidad voluntaria”. Los grupos empresariales pueden tener empresas off shore y trasladar sus capitales legalmente a otros Estados de la UE y de Europa. ¿O quizás myDATA detectará el contrabando de combustibles, armas y drogas? Todos sabemos la respuesta.

Para que no tengan duda, tenemos los datos que nos proporcionó la AADE. Gracias a la auditoría digital que detecta fácilmente las desviaciones de la media, ya ha identificado que de un millón de empresas y autónomos digitalmente registrados, ya 240.000 han realizado declaraciones fiscales incompletas y ocultan parte de sus ingresos.

Una gran parte de ellos son pequeñas empresas y trabajadores autónomos llevados a la asfixia financiera a causa de la política económica del gobierno y el antagonismo incontrolado, empresas que corren un mayor riesgo de quebrar en el futuro. La mejora del funcionamiento estatal no consiste en prestarles apoyo esencial sino en imponerlos impuestos duros.

Esta política sirve a la dirección de la UE de aumentar el tamaño de las empresas a través de fusiones y la centralización del capital. Además sirve a que los bancos y el Estado sigan sacando todo lo que pueden de las empresas sobre-endeudadas, sin que se crean muchas sacudidas a causa de los cierres repentinos y masivos.

¿O quizás se facilitará la vida a todos los contables? Ellos, en la primera fase, asumirán la gran carga de poner en marcha el proyecto inicial, configurar myDATA en cada empresa. A continuación, una vez automatizada en gran parte la contabilidad, se intensificará la competencia sobre cuántos permanecerán en estas actividades.

Y, por supuesto, la respuesta de los gobiernos ante las dificultades, la ansiedad y la incertidumbre sobre el futuro es bien conocida: la responsabilidad individual  y la opción individual de cada trabajador autónomo sobre su futuro.

 

AUMENTO DE LA EXPLOTACIÓN

 

La transformación digital de grupos empresariales y empresas individuales no suprime las leyes del beneficio, las leyes de la explotación, las leyes que rigen el funcionamiento de la economía capitalista.

Para que las ganancias de los grupos empresariales sigan aumentándose hay que seguir aumentándose el grado de explotación, hay que exprimir a los trabajadores. Se deben ampliar las relaciones de trabajo flexibles y la jornada laboral a través de la “ordenación del tiempo de trabajo”.

En manos del capital, la nueva tecnología se utiliza para aumentar la intensificación y la carga de trabajo de los que siguen trabajando, mientras al mismo tiempo aumenta el ejército de desempleados.

Las promesas de numerosos puestos de trabajo bien remunerados y creativos en la era de la transformación digital chocan también con la actualidad, con el funcionamiento de cada grupo empresarial cuyo objetivo es la ganancia. Y esta conclusión se confirma en todas partes, en Grecia y a escala internacional, en las empresas a la vanguardia de la tecnología.

En Grecia el grupo de la Organización Helénica de Telecomunicaciones ha anunciado este año la mayor rentabilidad de la última década e inversiones de 3.000 millones de euros.4 Al mismo tiempo, con la ayuda del sindicalismo patronal, suprime toda graduación salarial basada en la titulación y vincula directamente los salarios a la rentabilidad, a la productividad y a la evaluación de cada departamento, de cada dirección del grupo. En esencia, suprime aún más el salario medio real a la baja.

Desde luego, esto no sucede solo en Grecia. Los estudios confirman cómo la diferencia entre el crecimiento de la productividad y el de los salarios reales se ha ampliado en una proporción de 10 a 1 en los grupos de telecomunicaciones estadounidenses desde los años 80 hasta la actualidad.

Estos grupos estadounidenses en los últimos 20 años han tenido un aumento dos veces más rápido que la media de la economía, antes de que apareciesen señales negativos de su rentabilidad.

Ahora, en base a la productividad incrementada, las empresas reducen su personal y proceden a despidos masivos. Recientemente, en enero de 2023, Google despidió a 12.000 empleados y vio cómo sus acciones volvieron a subir un 5%5.. En el último año se han producido despidos masivos de más de 150.000  trabajadores en los gigantes tecnológicos, como Amazon, Microsoft, y Meta que despidió al 13% de su plantilla, a medida que ha ido viendo un descenso constante de sus beneficios en los últimos cuatro trimestres.

Los ejemplos griegos también son bien conocidos, como los cientos de despidos en BIT, que fue promocionada como una Start Up de éxito. El cambio reciente de propiedad en Twitter vino acompañado del despido de miles de empleados con el envío de un simple correo electrónico.

Y, por supuesto, la propia nueva tecnología está siendo explotada por el capital para imponer la intensificación, desde las modernas cámaras de vigilancia hasta los sistemas que indican al empresario cuánto tarda cada empleado en atender a un cliente, si trabaja intensamente y si está trasteando en su ordenador.

El objetivo del evento de hoy no es examinar en detalle todos los casos, desde los trabajadores con salarios de miseria que clasifican textos, fotos y vídeos para entrenar algoritmos de inteligencia artificial, hasta los trabajadores que se autodenominan "asociados" autónomos en plataformas como los taxis Uber.

 

ADMINISTRACIÓN ELECTRÓNICA Y FICHAJE DIGITAL

 

La transformación digital contribuye decisivamente en la interconexión y el entrelazamiento de todas las funciones del Estado del capital, para servir de manera unificada y más eficiente los intereses estratégicos de la clase dominante.

Esto lo podemos constatar en todas las direcciones de la administración electrónica y las funciones represivas y judiciales del Estado burgués.

El Registro Nacional de Procedimientos Administrativos "Mitos" pretende registrar todas las interconexiones entre ciudadanos y empresas y el Estado. Es decir, el Estado se cartografia a sí mismo a partir de sus servicios digitalizados (por ejemplo, el Registro de la Propiedad).

Al mismo tiempo, se está preparando la primera versión de gov.gr utilizando la  inteligencia artificial, lo que permitirá a los ciudadanos conversar en lenguaje natural, formulando preguntas a "Mitos".

Con la interconexión digital de los servicios estatales y el registro digital de los ciudadanos, se ofrece la posibilidad de registrar conjuntamente todos nuestros datos, desde nuestro historial médico hasta nuestra situación financiera, nuestras deudas y nuestros antecedentes penales, y la elaboración y utilización multiformes de estos datos.

Esta posibilidad terrible de la dictadura del capital se oculta tras inocentes proclamas sobre las ventajas de reducir las molestias en las oficinas de registro, modernizar los registros electorales y otras cosas similares obvias. Las proclamas del gobierno de que "todo el Estado cabrá en nuestro teléfono móvil" equivalen a la capacidad del Estado y otros centros para ejercer presión y manipulación sobre nosotros de forma colectiva e individual, ya que pueden procesar todos nuestros datos, es decir, cuánto y a quién debemos, qué delitos hemos cometido, qué problemas de salud tenemos, etc.

Una red de directivas de la UE bajo el engañoso título “Espacio de Libertad, Seguridad y Justicia”, garantiza el registro digital legal permanente y el procesamiento de datos de todos los ciudadanos de Europa, con una serie de direcciones que conciernen desde las huellas dactilares hasta los viajes. Se crean enormes bases de datos personales que se actualizan de forma preventiva, y no conciernen actividades específicamente delictivas o criminales.6

No se limitan a la vigilancia e interceptación de datos de determinados políticos o funcionarios del Estado. Se realizan legal y sistemáticamente mediante la invocación general de la seguridad nacional del capital frente al enemigo interno, el pueblo, así como mediante la criminalización de la difusión de la ideología radical de la violencia bajo el engañoso título de prevención del terrorismo. Y en este campo, una serie de aplicaciones tecnológicas están siendo promovidas y financiadas, por ejemplo, el proyecto bajo el gobierno de SYRIZA con fondos del Fondo Europeo de Seguridad Interior, para que la Policía de Grecia pueda extraer datos personales y cotejarlos con información de Facebook, Instagram, las redes sociales.

Con el procesamiento digital de los metadatos que conciernen los lugares de comunicación a través del móvil, el movimiento de los usuarios de móvil, el material de cámaras y mucho más, la Policía tiene, por ejemplo, la posibilidad de controlar quiénes han participado en las manifestaciones prohibidas de celebración del levantamiento de la Politécnica durante la pandemia.

Todos los partidos burgueses son cómplices en la aprobación y aplicación de este marco institucional reaccionario de la Unión Europea. Además son cómplices de las escuchas y el seguimiento de los teléfonos de la sede del Comité Central del KKE en Perissos, desde 2016 hasta la fecha.

Y por supuesto, las interceptaciones, el fichaje y el procesamiento de datos no se realizan solo por los servicios de inteligencias de los Estados. Se hacen de manera legal e ilegal por grupos empresariales. Cabe destacar que el comercio de software de espionaje ha sido legalizado.

Al respecto, el registro digital de recursos humanos del sector público puede concentrar en una carpeta digital única las evaluaciones, la movilidad, la participación en huelgas y los datos personales de todos los funcionarios públicos.

Habrá una carta individual digital obligatoria para cada funcionario público que incluirá su perfil de servicio completo. En el Ministerio del Interior funcionará un Sistema de Gestión de Recursos Humanos, en lo que se incorporarán las informaciones del registro actual de recursos humanos, la evaluación, la movilidad, y la planificación de la contratación.

En las condiciones actuales es un arma valiosa en manos de las administraciones para disciplinar a los funcionarios públicos para implementar con fervor la política gubernamental respectiva.

Tampoco se trata de un riesgo futuro indefinido. Basta con examinar las regulaciones legislativas para la evaluación de los profesores, las órdenes del ministro del Interior para recopilar datos para los funcionarios en huelga, así como sobre la intervención reciente en la Justicia para que se declaren ilegales las huelgas de los trabajadores en la Administración Local, incluso cuando los alcaldes no llevan al asunto a los tribunales.

En este marco, se prevé la evaluación de los jefes para la promoción de los objetivos de la estrategia del capital, tal como se reflejan en la respectiva política gubernamental, en las normas de la evaluación de los ejecutivos de las empresas multinacionales. Además, se está planeando el ejercicio del “automatismo social” con mecanismos de evaluación de los ciudadanos-clientes, como en los hoteles (por ejemplo, Tripadvisor), donde el ciudadano-“cliente” califica el resultado sin investigar las causas de los retrasos, por ejemplo, si se dispone del personal necesario, la infraestructura necesaria, etc.

 

JUSTICIA BURGUESA DIGITAL

 

Los programas y los planes de acción para la justicia electrónica de la Unión Europea pretenden apoyar eficazmente al capital a expensas del pueblo. Las prioridades no son facilitar y abaratar el acceso de las capas populares a la justicia. Tampoco se trata de mejorar las condiciones de trabajo de los funcionarios judiciales y de la gran mayoría de los abogados autónomos (p.ej. con la publicación electrónica de sentencias).

¿Cuáles son las prioridades en cuanto al desarrollo de proyectos (como el portal europeo de e-Justicia) y la aplicación de tecnologías como la red descentralizada e-codex que conecta los sistemas nacionales pertinentes?

Es la interconexión de los registros digitales nacionales en ámbitos críticos para las inversiones y el funcionamiento del mercado común, por ejemplo para los registros de la propiedad o los registros de empresas insolventes.

Es también la aceleración de la aplicación de decisiones judiciales relacionadas con la rentabilidad del capital, como las subastas electrónicas, y el blindaje de la función represiva del Estado burgués.

El carácter de clase también está presente en el uso de métodos de inteligencia artificial en la administración de justicia. Y no nos referimos a un futuro indefinido.

En algunos estados de EE.UU., los tribunales penales están utilizando el sistema Compas que investiga la probabilidad de que un delincuente vuelva a cometer delitos. Se trata de un algoritmo que correlaciona las respuestas de un acusado a unas preguntas y una serie de datos de sus antecedentes penales. La metodología de Compas es un secreto comercial y no es accesible al abogado del acusado. Este sistema ya ha sido criticado por conducir en la práctica a un trato negativo de los afroamericanos y es sólo uno de los muchos ejemplos de cómo las nuevas capacidades tecnológicas pueden utilizarse en manos del capital.7

Un ejemplo similar es el uso de la inteligencia artificial para la actuación policial predictiva y la prevención de la delincuencia en el procesamiento de datos personales, que se basa y contribuye a legitimar la persecución preventiva de personas concretas sin que hayan cometido un delito.

Llegaremos a las mismas conclusiones si examinamos la transformación digital en la Economía.

 

EL EJEMPLO EMBLEMÁTICO DE LOS BANCOS 

 

Cualquier sector de la economía que examinemos, se queda evidente fácilmente el rostro inhumano del capital en las condiciones actuales. En el sector bancario, la transformación digital se ha implementado rápidamente. El uso de los cajeros automáticos y la banca en línea (e-banking) alcanza ya los 4 millones de usuarios, mientras que el número de POS activos de empresas supera los 700 mil.

¿Ha supuesto la transformación digital algún cambio en el funcionamiento de los bancos a favor del beneficio capitalista? Al examinar cualquier aspecto, podemos ver fácilmente el mismo carácter antipopular-clasista. Lo vemos en la amplia brecha que separa los altos tipos de interés de los préstamos a las capas populares para hipotecas y créditos al consumo frente a los tipos de interés de los depósitos que se mantienen casi a cero, mientras la inflación se ha disparado. Lo veremos en los múltiples apoyos a los grupos bancarios por parte del Estado del capital bajo todos los gobiernos. Estos apoyos incluyen las provocadoras bajadas de impuestos con la reducción del tipo impositivo sobre los beneficios empresariales y el aplazamiento de las obligaciones fiscales (impuestos diferidos), las garantías estatales de 55.000 millones con los paquetes Hércules I y II que garantizaron el alivio del enorme volumen de créditos rojos a un coste mínimo. El Estado, a través del FGEF, soportó los costos operativos de los bancos en el período anterior y, cuanto se recuperó la rentabilidad, inició la "desinversión" de las participaciones que posee en los bancos Nacional, del Pireo y Alpha.

¿Qué han ganado los trabajadores en el mismo período mientras avanza la transformación digital en los bancos? Se produjo una reducción drástica del número de los empleados bancarios por un 51% en una década, de 63.408 en 2010 a 30.998 en 2021. Respectivamente, se produjo reducción drástica de sucursales bancarios y de los cajeros automáticos, de 4.005 en 2010 a 1.560 en 2021.

Es fácil ver el aumento de la intensificación de trabajo en los que siguieron trabajando tras el aumento del número de los ciudadanos que hay que atender un empleado bancario, así como el aumento de la dificultad de la población de edad avanzada que se ve obligada a realizar transacciones digitales. Al mismo tiempo, se ha aumentado el grado de explotación y la reducción del  ingreso real de los empleados bancarios. El nuevo convenio colectivo firmado por la cúpula sindical de OTOE teniendo como criterio “la resistencia y viabilidad” de los bancos incluye incrementos nominales acumulados de 5,5% para el trienio hasta 2024, es decir, ni siquiera compensa las nuevas pérdidas de los ingresos a causa de la disparada inflación alimentaria.

Las familias populares se habían cargado aún más con el peso adicional de los prestatarios de créditos hipotecarios derivado de las continuas subidas de tipos de interés del BCE en el trienio 2021-2023, así como del aumento de las subastas electrónicas. Desde 2019, se han publicado en la plataforma digital al menos 25.000 casos al año, que este año se han disparado a 52.000.

Pero a pesar del aumento del grado de explotación, el desplume de los trabajadores y el robo de los ingresos de las familias populares en todos los sectores de la economía, revela que el sistema no puede enfrentar el enorme problema de la sobreacumulación de capital a largo plazo.

 

LA NUEVA CRISIS QUE SE AVECINA

 

La transformación digital no puede anular las leyes científicas de la economía capitalista, que conducen al estallido periódico de crisis de sobreacumulación de capital. Al contrario, acelera la concentración y aumenta la sobreacumulación de capitales que no encuentran ámbitos de inversión con una tasa de rentabilidad satisfactoria. La economía alemana, motor de la zona euro, ya está en recesión. En términos más generales, el riesgo de recesión en la zona euro es cada vez mayor. El PIB de la zona euro se encuentra en un período de contracción desde el último trimestre de 2022. Los expertos del Eurosistema prevén que el crecimiento del PIB de la zona euro se ralentizará del 3,5% en 2022 al 0,9% en 2023.8

En el bloque del G7, las economías de Italia y Canadá también están en recesión, mientras que, por otro lado, la economía de China se encuentra en fase de desaceleración, con una alta posibilidad de crisis en el sector inmobiliario y de la construcción en general. Además del problemático mercado inmobiliario, ya se está produciendo un descenso del consumo y una caída de las exportaciones chinas.

La mayoría de los informes de los organismos internacionales y las agencias de calificación9 emiten una señal de riesgo de grave desaceleración de la economía internacional en 2023, destacando el impacto negativo de la aceleración de las subidas de los tipos de interés por parte de los bancos centrales, mientras que las presiones inflacionistas aún no han remitido. Ya a escala internacional, la tasa de crecimiento del PIB mundial y del comercio internacional de bienes y servicios sigue una senda de desaceleración.

Los recientes acontecimientos en los bancos estadounidenses confirman una vez más que la crisis nace del funcionamiento normal del sistema capitalista. Está en su ADN. Mucho antes de que las empresas de alta tecnología empezaran a retirar de los bancos, como el SVB, sus depósitos, ya se había producido el descenso de su tasa de beneficios. Las acciones de estas empresas se desplomaban en 2022. La sobreacumulación de capital que no puede invertirse con una tasa de rentabilidad satisfactoria también aumentó en EE.UU. Grupos como Amazon, Meta o Google despidieron a miles de trabajadores.

En el sector de las nuevas tecnologías, la proporción entre medios modernos y tecnología y mano de obra cambia en mayor medida, lo que tiene como consecuencia el aumento de la composición orgánica del capital y, en última instancia, la reducción de la tasa de beneficios. También hay razones contextuales, como el descenso de la demanda de empresas como Amazon y Netflix tras el fin de las restricciones pandémicas.

La propagación del teletrabajo que comenzó en el período de la pandemia tuvo un gran impacto negativo en el sector del alquiler de inmuebles comerciales y, posteriormente, en el sector de la construcción. Las mayores empresas de alquiler de oficinas comerciales, como WeWork, ven sus acciones cayendo en picada. Muchos bancos estadounidenses han hecho "grandes exposiciones" en el sector inmobiliario comercial.

Los mecanismos burgueses han utilizado todas sus armas para evitar una crisis profunda.

Los Bancos Centrales han conseguido créditos baratos para los Estados y "más dinero" para repartir los grandes paquetes de ayudas estatales. El resultado fue una inflación galopante, agravada por la guerra energética de Estados Unidos y la UE con Rusia.

A continuación, para confrontar la inflación, los Bancos Centrales subieron y siguen subiendo los tipos de interés. Pero cada medicamento para un síntoma se convierte en veneno para el otro. La subida de los tipos de interés y el encarecimiento de los préstamos refuerzan la ralentización y la recesión del crecimiento capitalista.

Algunos bancos de EE.UU se enfrentaron al riesgo de retirar sus depósitos. Para compensar las pérdidas, vendieron bonos del Estado que habían adquirido antes de la subida de los tipos de interés. Como resultado, los vendieron con pérdidas. La venta masiva de bonos estadounidenses por parte de China y Japón ha deprimido aún más su valor.

Ahora el gobierno estadounidense dice que garantiza todos los depósitos. Pero es un Estado sobre-endeudado, que ya ha superado la "línea roja" del techo máximo permanente de deuda soberana. La deuda pública estadounidense ha superado los 31,5 billones de dólares y el 120% del PIB, lo que ha desatado una disputa entre republicanos y demócratas sobre la necesidad de recortar el gasto público, que ha desembocado en un compromiso temporal.10

Una investigación publicada por Wall Street Journal hace referencia a decenas de bancos estadounidenses que están en condición problemática.11 Se calcula que la pérdida derivada de una venta masiva inmediata de bonos estadounidenses superaría los 620.000 millones de dólares.

El punto más básico es que cualquier medida o intervenciones gubernamentales, no pueden abordar la causa de sobre-acumulación de capital. No hay escasez, sino exceso de capital en los mercados. Las medidas estatales y la concentración de mayores cuotas de mercado en los grupos bancarios más fuertes sólo pueden aplazar temporalmente el estallido de la crisis. La próxima crisis será más profunda.

 

UN NUEVO CAMPO DE AGUDIZACIÓN DE LOS ENFRENTAMIENTOS ENTRE LOS CENTROS IMPERIALISTAS

 

La carrera por asegurar la supremacía en el ámbito tecnológico, especialmente en el campo de la inteligencia artificial, pero también en la explotación de la transformación digital de la economía capitalista y del Estado, es actualmente uno de los principales campos de agudización de las contradicciones interimperialistas.

Como ocurre en el conjunto de la economía, el sector tecnológico está dominado por dos poderosos polos que compiten por la supremacía: Estados Unidos y China. Los dos protagonistas tienen ventaja sobre los demás en cuanto a su capacidad de recopilar y procesar big data y deep learning. EE.UU cuenta con el poderoso quinteto GAFAMI (Google, Amazon, Facebook, Apple, Microsoft) y China con el BHATX (Baibu, Huawei, Alibaba, Tencent, Xiaomi).

EE.UU., que actualmente ostenta el liderazgo en el sector tecnológico, está impulsando una estrategia cuyos principales objetivos son, por un lado, perjudicar la dinámica de China y, por otro, aumentar el diferencial de poder con la Unión Europea.12

Por eso imponen restricciones a la exportación de chips de tecnología avanzada (con mayor velocidad y eficiencia energética) utilizados en ordenadores de inteligencia artificial en China, y más en general a la exportación de tecnología de hardware y software. Están presionando y han conseguido cierta cooperación de la UE y Japón en este sentido. Al mismo tiempo, empresas estadounidenses y taiwanesas han acusado a sus homólogas chinas de espionaje industrial (por ejemplo, las acciones legales de TSMC contra la china SMIC).

Al mismo tiempo, poderosas empresas estadounidenses y holandesas que se ven perjudicadas económicamente por las restricciones intentan eludirlas exportando productos de tecnología de generación avanzada (por ejemplo, ASML exporta productos de litografía ultravioleta DUV en lugar de EUV, y Nvidia exporta actualmente chips de estándares bajos al mercado chino).

Al mismo tiempo, EE.UU subvenciona generosamente a los monopolios nacionales de este sector. La Ley de Chips y Ciencia (aprobada por los demócratas y una parte de los republicanos) aseguró 52.000 millones de dólares en ayudas para aumentar la escasa cuota estadounidense en la fabricación de semiconductores avanzados y otros 200.000 millones a lo largo de una década para impulsar la respectiva investigación científica. Paralelamente, también está en marcha el Paquete de Transición Verde de Biden, dotado con 360.000 millones de dólares, que ofrece condiciones preferentes de ayuda a cualquier empresa europea que se instale en EE.UU. Así, por ejemplo, Apple, que tenía plantas de producción en China, ya está de salida.

Pero, según Bloomberg, las empresas estadounidenses están en desventaja, ya que producen bienes similares que les salen un 50% más costosos y un 25% más lentamente que en las fábricas del sudeste asiático.

La UE se alineó primero con EE.UU. en las restricciones a las exportaciones a China, enfrentándose a fricciones internas. Especialmente en Alemania, donde gran parte de las redes 5G alemanas han sido construidas por las chinas Huawei y ZET y Mercedes tiene grandes contratos de cooperación con la china CATL.

La UE ha formulado su propio programa de apoyo a los grupos empresariales europeos, el Acta Europea de Chips, con el objetivo de duplicar su escasa cuota del mercado mundial para 2030, del 10% al 20%. Pero la mayoría de los analistas cree que los 43.000 millones de euros no bastan para cubrir la gran distancia que ahora le separa de EE.UU.

Al mismo tiempo, en un esfuerzo por reforzar su autonomía, la UE ha celebrado acuerdos para albergar en suelo europeo seis potentes ordenadores cuánticos en Alemania, Francia, Italia, República Checa, España, Francia, Alemania, Italia y Polonia. Se trata de una infraestructura que aumenta considerablemente la capacidad informática para apoyar aplicaciones en la industria y la investigación científica.

El Gobierno de Japón también ha anunciado controles y restricciones especiales a la exportación de 23 tipos de microprocesadores a China. Japón cuenta con algunos de los mayores grupos de fabricación de procesadores, como Nicon y Tokyo Electron.

En abril de 2023, el Banco Mundial advirtió de que la tendencia a la "desconexión tecnológica" entre las dos mayores economías del mundo socava la innovación y la oferta de conocimientos científicos a escala internacional y perjudica el desarrollo capitalista internacional.

Por su parte, China se ha fijado el objetivo de convertirse en la primera potencia digital del mundo hasta 2030. Para ello, está aumentando el apoyo estatal a la industria china de microprocesadores. Sólo el YMTC recibió 7.000 millones de dólares en ayudas en 2023 para modernizar equipos y producción, mientras que la inversión china (centrada en alta tecnología) en 2023 supera los 32.000 millones de dólares en los 147 países incluidos en la nueva “Ruta de la Seda”.

Al mismo tiempo, China está imponiendo restricciones a la exportación de minerales de importancia estratégica para la transformación digital y la "transición verde", como el germanio (fibras ópticas), el galio (circuitos integrados - comunicaciones por satélite), el litio, el cobalto, etc. China cuenta actualmente con una gran ventaja para satisfacer la demanda internacional de estos minerales, sobre todo en la UE y EE.UU. Por eso se intensifica la lucha por el control de regiones de África, Asia y América Latina con riquezas minerales similares. Como represalia a las medidas de EE.UU., el Estado chino ha iniciado una investigación sobre la empresa estadounidense líder Micron Technology en relación con la seguridad de la cadena de suministro de infraestructuras de la información en China, que ya ha tenido un impacto negativo en su rentabilidad. La empresa Nvidia con sede en EE.UU también expresa públicamente su malestar por la ampliación de las sanciones estadounidenses.13

 

SOBRE EL "MILAGRO TECNOLÓGICO" DEL GOBIERNO DE LA ND

 

Además, el Gobierno promociona, con el apoyo de la propaganda estadounidense, sus resultados en la transformación digital como envidiables para los demás Estados de la Unión Europea.

Lo cierto es que Grecia en 2022 sigue manteniendo el puesto 25 de la UE en el Índice de Economía y Sociedad Digitales (DESI), con 38,9 puntos frente a la media de la UE de 52,3. Sólo está por delante de otros dos Estados balcánicos, Rumanía y Bulgaria. Sin embargo, ha mejorado ligeramente su posición en el ámbito de las infraestructuras de telecomunicaciones (22a de 27).

Las empresas, en particular, se sitúan al 70% de la madurez digital media de los 27 Estados miembros de la UE. Solo el 58% ha delegado los futuros planes de transformación digital a un ejecutivo. El porcentaje que se ha pasado totalmente al Cloud es casi un 10%, mientras que el uso de la IA para la toma de decisiones no supera el 3%, es decir, solo se utiliza por algunos grupos monopolísticos. En resumen, no se ha mejorado el papel de la burguesía nacional en la competencia internacional.

La transformación digital intensifica la presión sobre las pequeñas empresas, que no pueden competir con los grupos empresariales en el comercio electrónico, en términos de productos de marca, precios, posibilidades de transporte.

Además, según datos de Eurostat, Grecia tiene la proporción más baja de especialistas en TI en el empleo total, solo un 2,5% frente a la media de la UE del 4,6% en 2022. Un estudio de la Federación de Entidades Helénicas de Tecnología de Información y Comunicaciones estima una demanda adicional de 15.000 especialistas en TI al año para 2030 (incluyendo diferentes niveles de especialización), es decir, se necesitan 150.000 científicos y técnicos más en tecnologías de la información y la comunicación.

El mercado nacional reducido y el retraso del país en el contexto de crecimiento desigual de la UE también afectan al desarrollo de las infraestructuras. Por ejemplo, en las "zonas blancas", es decir, en los lugares geográficos sin cobertura  televisiva, las redes públicas de telefonía móvil e internet permanecen inactivas, pese a estar concedidas desde 2018, porque ninguno de los "proveedores" quiere explotarlas, teniendo como criterio su rentabilidad.

El Estado vuelve a subvencionar pródigamente a los grupos empresariales (OTE, Grid Telecom - TERNA) para que realicen inversiones en fibra óptica que garanticen conexiones a internet muy rápidas a 800.000 empresas y hogares, a través del Plan de Bonos Gigabit.

EN resumen, en manos del capital, la transformación digital de la economía y del Estado está siendo explotada para aumentar el grado de explotación de los trabajadores y la represión, y para generalizar el fichaje digital del pueblo, al tiempo que conduce a crisis más profundas y a una mayor agudización de los antagonismos interimperialistas. Va de la mano con el aumento de las desigualdades sociales, la pobreza digital y energética y el aumento del desempleo de larga duración.

 

LA ERA DE LA INTELIGENCIA ARTIFICIAL

 

Estas tendencias se están reforzando, a medida que se impulsa la transformación digital por el rápido desarrollo de la inteligencia artificial desde principios de 2010, debido a la convergencia de tres avances científicos y tecnológicos: La capacidad de procesar enormes cantidades de datos resultantes del uso de internet, es decir, los big data; la capacidad de los ordenadores de entrenarse con algoritmos sofisticados, es decir, el aprendizaje computacional (redes neuronales y aprendizaje profundo); la posibilidad de mejorar la capacidad de los superordenadores modernos y los ordenadores cuánticos.

En pocas palabras, las máquinas modernas están adquiriendo cada vez más capacidades humanas, como el auto-aprendizaje, y las y los trabajadores, la principal fuerza productiva viva, utilizan máquinas cada vez más complejas. Al mismo tiempo, las "máquinas que aprenden", los robots, los centros digitales que recogen y procesan enormes volúmenes de datos, están en manos de unos pocos grupos monopolísticos, principalmente de EE.UU y China, pero también de la UE y Japón.

En este contexto, el ministro respectivo resume la estrategia de capital para Grecia de la siguiente manera: "Estamos llamados a construir el sistema nervioso del país, para poder conectar sus distintos registros, disponer de una gran cantidad de datos y hacer realmente el entrenamiento previsto de los algoritmos (...) Al mismo tiempo, nos estamos centrando en el aprendizaje automático, una estrategia sobre cómo conseguiremos integrar estas aplicaciones de la inteligencia artificial en nuestra economía”.14 Ya hemos explicado las consecuencias de la aplicación de esta dirección para el pueblo.

Desde luego, no es la primera vez que una revolución tecnológica tiene múltiples aplicaciones que no se limitan a la producción, sino que afectan a todo el espectro de la vida de la sociedad. Recordemos los rápidos cambios provocados por la llegada de las máquinas de vapor, la electricidad y la explotación de la energía nuclear.

Pero lo cierto es que el desarrollo de la inteligencia artificial en el marco de las relaciones de producción capitalistas agrava problemas ya conocidos, como el aumento del desempleo, y plantea nuevas cuestiones originales que requieren una investigación en el plano de la economía política y la filosofía. La cuestión principal concierne la investigación de los cambios en la relación entre la principal fuerza productiva, el ser social trabajador, y las máquinas modernas, los medios de producción.

El debate científico se centra en la rápida expansión de las capacidades de las máquinas que aprenden y se autoforman para sustituir gran parte del trabajo humano actual. Inicialmente se estimaba que este alcance se limitaría a sustituir gran parte del trabajo manual y mental rutinario, las profesiones que requieren acciones rutinarias repetitivas y estructuradas en un entorno determinado.

Los análisis burgueses más autorizados de hace unos años sobre este tema aseguraban que las profesiones que requieren verdadera creatividad y reacción ante entornos impredecibles quedan fuera del ámbito de capacidades de la IA.15  Pero resultó que las redes neuronales de las "máquinas que aprenden" pueden desarrollar distintas capacidades analizando una multitud de datos. Adquieren la capacidad de alcanzar objetivos complejos. Ahora tienen la capacidad de adquirir nuevos conocimientos y aplicarlos a un ámbito específico. La inteligencia artificial está penetrando incluso en la creación artística, la pintura, y el cine.

En un debate reciente de la Institución Brookings, se afirmó que ya no podemos "descartar la posibilidad de que todos los trabajos que hoy realizan trabajadores cualificados puedan ser realizados por máquinas". El profesor Geoffrey Hinton, que sentó las bases para la construcción de sistemas de inteligencia artificial, renunció recientemente de Google y dio la voz de alarma sobre las consecuencias imprevistas del desarrollo incontrolado de sistemas por parte de poderosos grupos empresariales. Al mismo tiempo, 1.000 ejecutivos de alto nivel en nuevas tecnologías firmaron una carta abierta sobre las consecuencias negativas imprevistas. Desde luego, no se trata de "tecnófobos" ni de "luditas".

Lo cierto es que muchas de las profesiones actuales desaparecerán y otras cambiarán de contenido. Pero esto no significa la abolición del papel del trabajador como principal fuerza productiva. La descodificación de algunos de los procesos neuronales que tienen lugar en el cerebro humano y el estudio de las innumerables conexiones de las células nerviosas que forman la base biológica de la cognición humana están progresando. Sin embargo, el desarrollo de la cognición humana es un fenómeno mucho más complejo y no se limita a las capacidades cognitivas de cualquier ser humano individual.

El cerebro humano como órgano para pensar y formar la conciencia se desarrolla y se mejora históricamente en el proceso del trabajo social y de la vida social en general. El trabajo social se realiza dentro de las relaciones de producción dominantes, ya sean feudales, capitalistas o socialistas. Allí la persona forma su capacidad de reflejar la realidad de forma generalizada con conceptos, juicios, razonamientos. Adquiere la capacidad de desarrollar conocimientos científicos, la capacidad de fijar objetivos, de construir y poner en marcha, de utilizar los medios de producción. El hombre social puede hacer planes, fijar objetivos, planificar y ejecutar acciones para alcanzarlos, predecir el resultado final de sus acciones. Es la principal fuerza productiva de todo modo de producción.

La inteligencia artificial no piensa de forma global y compleja como los seres humanos. En la actualidad, principalmente transforma rápidamente unos datos en otros.16 En esencia, los superordenadores son más rápidos y eficaces para tareas específicas. No pueden pensar políticamente y fijar objetivos generales de contenido social, por ejemplo, cambiar el sistema, el modo de producción. Pueden procesar rápidamente sobre la base de datos mensurables, cuantitativos y sobre la base de criterios específicos establecidos por seres humanos sociales, en el contexto de las relaciones de producción dominantes en un período preciso.

Como señala Max Tegmark, se trata “como la diferencia entre lo bien que un tractor puede hacer el trabajo de un coche de fórmula 1 y viceversa". Al mismo tiempo, la relación complementaria entre el ser humano y la "máquina inteligente" puede garantizar al trabajador nuevas posibilidades de mejorar su propia fuerza de producción.17

Consideren la posibilidad de un médico de utilizar algoritmos diagnósticos y terapéuticos y de explotar rápidamente grandes volúmenes de datos científicos modernos.

Consideren el uso de sensores para aumentar la capacidad de los sentidos humanos y la posibilidad de interacción directa y fusión con la "máquina inteligente" en el futuro.

Todo esto no significa que debamos complacernos, sino centrarnos en el verdadero problema, las relaciones de producción capitalistas actualmente dominantes. Consideren, por ejemplo, hasta qué punto están aumentando las posibilidades de los poderosos grupos empresariales antes mencionados de influir y manipular de forma permanente y directa la conciencia de los trabajadores, en el caso de la legalización de la inserción de implantes en nuestros cerebros.

 

EL CARÁCTER CLASISTA DEL DESARROLLO DE LA INTELIGENCIA ARTIFICIAL

 

La inteligencia artificial realiza hoy lo que el capital quiere que realice. Esto se aplica a la producción, la educación, la cultura, todos los ámbitos de la vida social. Su explotación en aras del beneficio capitalista puede conducir a un gran aumento del desempleo de larga duración y permanente, a la exclusión de la producción de una parte importante de la población y a la condena de la población a vivir con una "renta mínima garantizada", es decir, a sobrevivir con un subsidio de extrema pobreza.

Las previsiones y estimaciones varían en función de los objetivos políticos de sus autores. Algunos sostienen que, como en toda revolución tecnológica, se crearán muchas profesiones nuevas que absorberán las pérdidas (por ejemplo, desarrolladores de software y aplicaciones de IA, especialistas en ciberseguridad).

En 2021, el Foro Económico Mundial predijo que, debido al cambio en la división del trabajo entre los humanos y las máquinas, se crearán 97 millones de nuevos puestos de trabajo y 85 millones serán eliminados para 2025.

El informe McKinsey predice que entre 2035 y 2075 se eliminará el 50% de los puestos de trabajo actuales en todo el mundo, mientras que la inteligencia artificial creativa añadirá hasta 4 billones de dólares al año a la economía mundial. Varios estudios relacionados, por ejemplo el de PricewaterhouseCoopers, van en la misma línea.

Importantes analistas señalan que, basándose en la masividad del empleo en EE.UU, la primera nueva ocupación creada por la informática ocupa el puesto 21º. El impulso de las pérdidas será significativamente mayor que el de la creación de nuevos puestos de trabajo.

El problema se intensificará en los próximos años. Según la Federación Internacional de Robótica (IFR), más del 75% de los puestos de trabajo de la industria siderúrgica ya han sido sustituidos por robots convencionales y procesos automatizados en los últimos 30 años. Y eso fue antes de que aparecieran los robots modernos, capaces de sustituir a los trabajadores en tareas cognitivas creativas.

Sin embargo, este desarrollo no es un camino de sentido único. Se trata de la influencia decisiva del capitalismo sobre las prioridades en el desarrollo de la tecnología, en la organización de la producción, en la educación.

Del mismo modo, no existe un desarrollo de clase neutral de la investigación científica y del trabajo científico. El capital controla hoy el flujo de los conocimientos científicos, las formas y los métodos de explotación de los conocimientos científicos, las prioridades y las normas. La competencia entre grupos empresariales y las patentes frenan la socialización más profunda de la investigación científica.

En general, algunas aplicaciones tecnológicas neutrales no se desarrollan independientemente de qué clase ostenta el timón del poder y las llaves de la economía. Los poderosos grupos monopolistas y los centros imperialistas deciden en la práctica qué datos se recogen digitalmente, según qué criterios y procedimientos, qué información se extrae y con qué fin.

Mucha gente quedó impresionada, y con razón, por la aplicación de inteligencia artificial Chat GPT, que se extendió y se hizo famosa en muy poco tiempo. Se anuncia como un modelo lingüístico interactivo neutral e imparcial que puede responder directamente a nuestras preguntas.

En su versión original le preguntamos si la Unión Soviética era un régimen democrático. Nos contestó que no lo era, ya que no existía el pluripartidismo, las elecciones libres ni la tolerancia de la opinión política contraria. Añadió, por supuesto, que existen diferentes opiniones y criterios ideológicos.

Evidentemente, este sistema ha sido "entrenado" con material impregnado de la ideología burguesa dominante. Algunos alumnos y estudiantes ya lo utilizan como herramienta para sus exámenes y trabajos. Y ya ha provocado un vivo debate sobre la limitación de su uso en la comunidad académica y sobre las consecuencias negativas que su uso imprudente puede tener en la disminución de las facultades críticas del usuario.

Pero el efecto negativo principal del sistema capitalista concierne los obstáculos que pone al desarrollo de la principal fuerza productiva, el trabajador. El desarrollo tecnológico en vez de utilizarse para el desarrollo integral de la personalidad y las capacidades mentales y físicas del trabajador, se utiliza para que el capital ataque sus derechos. Se explota de tal manera que, por un lado, aumenta la intensificación y la explotación de la fuerza de trabajo de los que trabajan y, por otro, aumenta el ejército permanente de desempleados, la pobreza, y el desperdicio de la fuerza de trabajo de una parte importante de la población. Afecta de muchas maneras la salud física y mental de los trabajadores y desempleados que viven en condiciones de incertidumbre e inseguridad ante el día siguiente. Aumenta la alienación del trabajador respecto a sus semejantes y la competencia individual.

Las capacidades de los sistemas de ingeniería para coordinarse entre sí y con los trabajadores y realizar tareas complejas han despegado. Al mismo tiempo, como decíamos, está cambiando el contenido de muchas tareas y la necesidad de formación adicional continua. Se aumentan las demandas de trabajo intelectual humano, las exigencias de formación adicional continua, de trabajo en equipo, de adaptación rápida a nuevas experiencias y tareas laborales.18

 

LAS "GOLONDRINAS" DEL SOCIALISMO

 

Consideren la diferencia radical entre la forma en que el capitalismo responde a estos problemas y la forma en que lo hace el socialismo. En el capitalismo, el trabajador tiene que hacer frente a la rápida adaptación a nuevas tareas y a la actualización de sus conocimientos como una responsabilidad propia y con el miedo a quedarse en paro y sin seguridad social.

El socialismo, por el contrario, puede desbloquear, dar rienda suelta a la capacidad creadora de los trabajadores, a su iniciativa, porque los pone al frente de la marcha histórica hacia la liberación social.

Cambia el objetivo de la producción y el papel de los trabajadores. El objetivo de la producción se convierte en la satisfacción de las necesidades cada vez mayores de la sociedad. Los trabajadores, liberados del yugo de la esclavitud asalariada, desempeñan diariamente un papel activo en la toma y el control de las decisiones. Las llaves de la economía y el timón del poder pasan a manos de la clase obrera. La fuerza motriz del progreso ya no es la competencia, sino el poder de la colectividad en el trabajo.

El agua, la energía, la sanidad, las comunicaciones, el transporte, la educación y la propia fuerza de trabajo dejan de ser mercancías. La tierra y los medios de producción, las fábricas, las centrales digitales, los puertos, los aeropuertos, las infraestructuras pasan a ser propiedad social del Estado.

"¿Se puede hacer todo esto?", nos preguntan muchos de forma bienintencionada.

Pero ya se hizo, en la Unión Soviética en el siglo XX. Se consiguió gracias a la planificación científica central y a la socialización de los medios de producción;  se conquistaron logros que el capitalismo jamás podrá garantizar.

Se abolieron el desempleo y la pobreza energética. El pueblo accedió gratuitamente a servicios sanitarios y educativos de alto nivel. Se lograron avances tecnológicos impresionantes, como la conquista del espacio.

Por supuesto, también hubo una experiencia negativa, cuando los principios de la construcción socialista fueron abandonados y socavados gradualmente y prevaleció la política del "socialismo con mercado", allanando el camino al derrocamiento del socialismo.

Pero esta experiencia negativa a su manera también arroja luz sobre la superioridad del socialismo. Una superioridad que se acrecienta en el siglo XXI.

Porque ahora podemos aprovechar las grandes nuevas posibilidades de construcción socialista creadas por la informática, la tecnología digital, la robótica y la inteligencia artificial, que son las "golondrinas del socialismo".

Ahora ya no hay una serie de limitaciones técnicas y científicas que restringieron las posibilidades de la planificación central y la construcción socialista en la Rusia de 1917 y la Unión Soviética de los años 30. Ahora el grado de socialización del trabajo y de automatización de la producción ha aumentado considerablemente.

Piensen en las nuevas posibilidades que tenemos hoy de aumentar el tiempo libre de los trabajadores gracias al aumento de la productividad y del grado de socialización de la producción si el beneficio capitalista deja de ser el criterio de decisión en la economía.19

Piensen en las nuevas posibilidades de elevar el nivel general de educación de los trabajadores y el contenido creativo de su trabajo, las posibilidades de desempeñar un papel activo en la toma de decisiones y en el control diario de las mismas. Piensen en la superioridad del socialismo en la formación del hombre social, mucho más capaz de explotar las posibilidades y de responder a las exigencias de la época de la inteligencia artificial.20

Piensen en las capacidades tecnológicas de la planificación científica central para recopilar y procesar rápidamente grandes cantidades de datos con el fin de tomar decisiones rápidas y óptimas sobre problemas complejos.

Piensen en el potencial de la investigación interdisciplinar para anticiparse a las necesidades futuras y desarrollar aplicaciones tecnológicas con rapidez, una vez que se haya liberado de los grilletes y limitaciones que imponen hoy la ley del beneficio capitalista y la competencia de los grupos empresariales en el mercado.

Piensen en las posibilidades de utilizar la inteligencia artificial, la informática y los robots para mejorar la protección civil, la gestión de accidentes a gran escala y los servicios sanitarios.

Piensen en las posibilidades de interconectar y coordinar unidades de producción, ya que la myDATA del socialismo no conectará empresas que compiten entre sí por beneficios y cuotas de mercado y tratan de evadir impuestos al Estado.

Piensen en las posibilidades de predicción automática de averías, de pedido automático de piezas de recambio.

Sobre todo, piensen en las posibilidades materiales para la rápida eliminación de todas las formas de propiedad individual y de grupo.

Este es el camino de la transformación digital y de la explotación de la inteligencia artificial en beneficio de las necesidades del pueblo que el KKE destaca con su Programa revolucionario. Y, por supuesto, no estamos esperando a que amanezca un gran día para implementar este Programa.

Damos un paso adelante para organizar el gran contraataque del pueblo que abrirá el camino al derrocamiento del bárbaro sistema de explotación.

Hoy estamos a la vanguardia de la lucha por la reducción del tiempo de trabajo, por jornada laboral de 35 horas semanales, 5 días y 7 horas de trabajo, con aumentos sustanciales de salarios y pensiones.

Estamos a la vanguardia de la lucha contra la política de liberalización de la UE que genera pobreza energética y digital. Luchamos por comunicaciones y transportes seguros, rápidos y baratos. Luchamos por abolir el marco reaccionario de la UE que permite el registro electrónico preventivo de todos los ciudadanos. Luchamos por el uso de las nuevas tecnologías para mejorar la protección civil. Luchamos por servicios de sanidad y educación públicos y gratuitos.

 

Estimados amigos:

Hoy, cuando existen todas las condiciones para una vida mucho mejor, no  debemos caer en la trampa de elegir con quién sufriremos menos pérdidas al día siguiente. No tenemos por qué elegir con qué gobierno burgués volverá a perder el pueblo para que el capital se beneficie de nuevo.

Podemos y debemos condenar a todos los culpables que nos han llevado a la situación actual. Podemos y debemos luchar junto al KKE. Debemos fortalecer al KKE en todas partes, en los centros de trabajo, en los barrios, en la batalla electoral. Para tener una oposición popular más fuerte dentro y fuera del parlamento, frente a los tiempos difíciles y la crisis que se avecina.

Podemos y debemos luchar en la era de la inteligencia artificial para ganar la vida que merecemos.

Qué sean fuertes!

 

NOTAS:

 

*El artículo fue presentado en breve por Makis Papadopoulos, miembro del Buró Político del CC del KKE, en un acto de la Organización de la región de Ática sobre la transformación digital el 19.3.2023, en la Tecnópolis del municipio de Atenas después del crimen en Tempe.

1. K.Pierrakakis fue sucedido en este ministerio después de las elecciones parlamentarios de 2023 por Dimitris Papastergiou.

2. A esto le siguieron los grandes incendios de este verano desde Rodas hasta Tracia y la inundación en Tesalia, que confirmaron las terribles deficiencias en el sector de la Protección Civil.

3. El informe de la UE “Estado de la Sanidad en EU - Perfil sanitario de Grecia 2021” y el estudio de los Médicos del Mundo sobre la asistencia sanitaria en Grecia (2020).

4. “OTE asegura una inversión de 3.000 millones de euros en redes de alta velocidad”  www.businessdaily.gr, 21.2.2022.

5. “Google: despide a 12.000 empleados”, diario Naftemporiki, 20.1.2023.

6. Sección de Justicia del Comité Central del KKE, Dictadura del capital, el verdadero rostro del Estado burgués de Derecho contemporáneo, ed. Synchroni Epochi, y Shoshana Zuboff, La era del capitalismo de vigilancia, ed. Kastanioti.

7. Para un debate académico más general sobre el tema véase, por ejemplo, la obra colectiva “Puede un algoritmo...”, publicaciones universitarias de Creta.

8. En agosto de 2023 los indicadores adelantados de Índice de Gestores de compras (PMI) mostraron un descenso al punto más bajo de los últimos 33 meses, tanto en el sector manufacturero como en otros sectores clasificados por la estadística burguesa como “servicios”.

9. “Advertencia del FMI: Continúa la desaceleración de la economía mundial”, diario Imerisia, 9.12.2022.

10. En agosto de 2003, la agencia Fitch rebajó la calificación crediticia de EE.UU, mientras que los rendimientos de los bonos de Tesoro de EE.UU a diez años   llegaron a su punto más alto a partir de 2007, aumentando el coste de gestión de la deuda estadounidense.

11. En el verano de 2023, Moody’s rebajó la calificación de diez bancos estadounidenses de tamaño medio y puso en vigilancia a algunos grandes bancos como el Banco de Nueva York Mellon y US Bancorp.

12. Véase por ejemplo, P. Roumeliotis, "La guerra de inteligencia artificial entre EE.UU y Chinar", Crónica Económica nº 168.

13. En septiembre de 2023 se publicó que China había decidido crear un nuevo fondo de inversión estatal (Big Fund) y recaudar 41.000 millones de dólares nuevas inversiones para el desarrollo de semiconductores. Al mismo tiempo, Huawei presentó su nuevo smartphone con sistema operativo y microprocesadores de alto rendimiento, demostrando que puede resistir al bloqueo de la tecnología occidental.

14. K. Pierrakakis, “Comenzamos desde lo básico, participamos activamente en el desarrollo", Crónica Económica, nº 168.

15. Por ejemplo, Max Tegmark, "Life 3.0", ed. Travlos.

16. Véase la entrevista al profesor Luciano Floridi en el diario Kathimerini, 2.8.2020.

17. Erik Brynjolfsson y Andrew McAfee, "La segunda era de las máquinas", ed. Kritikí (en griego).

18. G. Stournaras, "Los avances tecnológicos y el futuro del trabajo", diario Ta Nea, 23-26.12.2021.

19. Comité Ideológico del CC del KKE, El socialismo es la respuesta para el siglo XXI, ed. Synchroni Epochi.

20. Véase W. Eichorn - A. Bauer – G.Koch, La dialéctica de las fuerzas productivas y las relaciones de producción y, ed. Anagnostidis, y E. Ilienkov, La dialéctica como forma de pensamiento - De ídolos e ideales, ed. Odiseo (en griego).